¿Qué es La Esquina?
Por Berna.
Mucha gente nos pregunta qué es La Esquina y cómo el proyecto llegó a ser lo que es hoy. Creo que, como todo emprendimiento social, el proyecto fue objeto de un proceso de prueba y error y sobre todo de un proceso de apreciación; que, con el paso del tiempo, nos permitió entender mejor a la población con la que trabajamos.
Ambos procesos (ojo que estos siguen), nos obligaron a hacer cambios, con el fin de ajustarnos a las necesidades reales de la comunidad, sobre la cual buscábamos tener impacto. Inicialmente este esfuerzo se centró únicamente en La Carpio.
Lo que inició como como una empresa de serigrafía, en la cuarta parada de La Carpio, que buscaba principalmente darle trabajo decente y bien remunerado a jóvenes de comunidades marginadas, se transformó en una plataforma de apoyo integral para estos muchachos, la cual está conformada por los siguientes componentes: (i) apoyo académico; (ii) apoyo profesional; (iii) desarrollo comunitario; y, (iv) desarrollo de negocios.
Más adelante explicaré de forma resumida, en qué consisten cada uno de estos componentes. Aclaro que, la intención de este artículo es explicar cómo llegamos a ser lo que somos y no tanto, en cómo funciona la plataforma. En otra ocasión hablaremos del modelo de trabajo.
¿Por qué el cambio? Pues con el transcurso del tiempo y conforme íbamos entendiendo cada vez más a la comunidad, nos dimos cuenta que, más que un trabajo, estos jóvenes lo que necesitaban era un aliado, un “compa”, que los ayudara a alcanzar sus metas. Una persona que los motivara a volver al cole, a buscar brete, o que simplemente los escuchara y les diera un buen consejo.
Creo que, en un mundo tan ajetreado y cada vez más indiferente, como en el que vivimos, no le damos la importancia que realmente merece, al gesto que representa el sacar el tiempo para escuchar los problemas de los demás y dar un buen consejo.
Poner en pausa el trabajo, o simplemente sacrificar tiempo personal, con la familia y amigos, para ayudar a alguien, sin esperar nada a cambio, no solo tiene un mensaje muy poderoso, sino que, además, tiene un valor mucho más allá de lo económico, que no se puede cuantificar.
Así las cosas, migramos hacia un esquema de mentorias, en el que a cada voluntario se le asigna un joven miembro y se le nombra “padrino” o “madrina”, para que de forma conjunta: (i) preparen un plan de trabajo a mediano plazo (generalmente anual); y, (ii) que el “padrino” o “madrina” ayude a ese muchacho, o muchacha, a implementarlo.
Ese plan de trabajo es integral, pues incluye metas a nivel académico, profesional (por eso los componentes señalados anteriormente) y además objetivos a nivel personal (hacer más deporte, conocer una playa, tocar un instrumento etc).
Se busca lograr este apoyo a nivel individual, mientras procuramos que el miembro se involucre en actividades de ayuda a su comunidad (componente de desarrollo comunitario). Obviamente, este apoyo no es gratis, por lo que a través de diferentes emprendimientos (componente de negocios) como la serigrafía, venta de camisetas con la marca “La Esquina”, aportes de los voluntarios y aliados externos, buscamos generar los ingresos necesarios, para asegurar que los miembros del proyecto, cuenten con los recursos necesarios, para alcanzar las metas plasmadas en su plan de trabajo.
Como dije al principio, tanto el proceso de “prueba y error”, como el de apreciación continúan, pues entendemos que en La Esquina trabajamos con personas, cuyos anhelos y metas probablemente cambiarán. Nuestro modelo de trabajo no está escrito en piedra y, por el contrario, evolucinara, según sea necesario para atender las necesidades de sus miembros.
Bernardo Van Der Laat es abogado asociado en BLP. Es voluntario en La Esquina desde el año 2013.